La magistrada Josefina Ibarra Rodríguez citó para mañana a la audiencia de incidente de desacato a una sentencia del Consejo de Estado que ordenó la reubicación de las familias que habitan en Colinas de Vista Hermosa.
Desde comienzos de este año, hay muchas personas que han hecho solicitudes a ese organismo para que “de una vez por todas tome una decisión sobre el trámite incidental de desacato donde las constructoras, los bancos y el municipio de Villa del Rosario no han cumplido el fallo”, dijo el abogado Omar Javier García Quiñónez.
Según el apoderado de una buena parte de los habitantes de la urbanización, “el tiempo se venció desde el 26 de enero de 2013, cuando según la sentencia no debería existir la urbanización”.
Durante el período de dos años y ocho meses, desde que se produjo la decisión del máximo organismo de lo Contencioso administrativo, los alcaldes rosarienses no han reubicado a nadie, dijo el jurista.
“Por lo tanto hay un incumplimiento”, insistió García Quiñónez.
En el fallo del 16 de diciembre de 2010, el Consejo de Estado alertó que las viviendas de la urbanización Colinas de Vista Hermosa se encuentran en peligro de derrumbarse, razón por la cual se deben llevar a otro lugar a las 366 familias residentes allí.
Para los consejeros Rafael Ostau de Lafont Pianeta, María Elizabeth García González, María Claudia Rojas Lasso y Marco Antonio Velilla Moreno, el estado de las casas representa un problema para los habitantes, no solo en relación con sus bienes y enseres, sino por el riesgo para sus vidas.
Anotaron que de acuerdo con los dictámenes practicados, era recomendable para este tipo de suelos poner losas de cimentación rígidas bajo los muros portantes de carga, con vigas.
Por la localización de Colinas de Vista Hermosa en una ladera, añadieron, la urbanización requería de unos criterios específicos de diseño, con estudios de suelos minuciosos y análisis geológicos y morfodinámicos del sector.
Las aguas lluvias en esos suelos y subsuelos representan una amenaza ante eventuales procesos de remoción en masa, por lo cual su tratamiento debió ser considerado durante las etapas de diseño y construcción, se lee en la sentencia.
En virtud de tal circunstancia, notificaron los magistrados, era natural que en el sitio se evidenciaran los fenómenos de erosión y cambio volumétrico de la arcilla, que se advierte en las casas repletas de grietas, los muros y paredes averiados y las calles abiertas.
Desde comienzos de este año, hay muchas personas que han hecho solicitudes a ese organismo para que “de una vez por todas tome una decisión sobre el trámite incidental de desacato donde las constructoras, los bancos y el municipio de Villa del Rosario no han cumplido el fallo”, dijo el abogado Omar Javier García Quiñónez.
Según el apoderado de una buena parte de los habitantes de la urbanización, “el tiempo se venció desde el 26 de enero de 2013, cuando según la sentencia no debería existir la urbanización”.
Durante el período de dos años y ocho meses, desde que se produjo la decisión del máximo organismo de lo Contencioso administrativo, los alcaldes rosarienses no han reubicado a nadie, dijo el jurista.
“Por lo tanto hay un incumplimiento”, insistió García Quiñónez.
En el fallo del 16 de diciembre de 2010, el Consejo de Estado alertó que las viviendas de la urbanización Colinas de Vista Hermosa se encuentran en peligro de derrumbarse, razón por la cual se deben llevar a otro lugar a las 366 familias residentes allí.
Para los consejeros Rafael Ostau de Lafont Pianeta, María Elizabeth García González, María Claudia Rojas Lasso y Marco Antonio Velilla Moreno, el estado de las casas representa un problema para los habitantes, no solo en relación con sus bienes y enseres, sino por el riesgo para sus vidas.
Anotaron que de acuerdo con los dictámenes practicados, era recomendable para este tipo de suelos poner losas de cimentación rígidas bajo los muros portantes de carga, con vigas.
Por la localización de Colinas de Vista Hermosa en una ladera, añadieron, la urbanización requería de unos criterios específicos de diseño, con estudios de suelos minuciosos y análisis geológicos y morfodinámicos del sector.
Las aguas lluvias en esos suelos y subsuelos representan una amenaza ante eventuales procesos de remoción en masa, por lo cual su tratamiento debió ser considerado durante las etapas de diseño y construcción, se lee en la sentencia.
En virtud de tal circunstancia, notificaron los magistrados, era natural que en el sitio se evidenciaran los fenómenos de erosión y cambio volumétrico de la arcilla, que se advierte en las casas repletas de grietas, los muros y paredes averiados y las calles abiertas.
Audiencia de desacato
Para el 8 de noviembre, a las 9:00 de la mañana, el Tribunal Administrativo llamó a la audiencia sobre la providencia de Colinas de Vista Hermosa.
La cita se cumplirá en la sala de audiencia oficina 207 bloque C, segundo piso del Palacio de Justicia.
La magistrada Josefina Ibarra citó al alcalde de Villa del Rosario, Carlos Julio Socha; a los representantes legales de las constructoras Gilpa Ltda. y Herpa Ltda. y a la junta de acción comunal.
También, los delegados de los bancos Colpatria, Red Multibanca y Davivienda, la Defensoría del Pueblo, al secretario de Planeación de Villa del Rosario y al procurador 23.
Cada uno de los asistentes rendirá informe sobre el cumplimiento de la sentencia proferida dentro del proceso.
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