Un atraco en una ferretería terminó con la muerte de José Gregorio Amado Quintero, de 25 años, que de manera solidaria persiguió a uno de los ladrones, quien le disparó al pecho y a la cabeza.
El caso se registró ayer a las 9:00 de la mañana en el barrio La Palmita (Villa del Rosario), donde el delincuente atacó a bala a Amado Quintero al ver que lo perseguía en una moto Yamaha DT. El asalto ocurrió en la ferretería ubicada en la carrera 9 con calle 18 del mismo barrio.
El coronel Oscar López, subcomandante de la Policía Metropolitana, indicó que el robo fue cometido por cuatro desconocidos, quienes ingresaron armados al establecimiento y obligaron a los empleados a cerrar las puertas. Luego, subieron al segundo piso y robaron el dinero que encontraron en billetes y monedas, que promediaron en $200.000.
Las unidades de La Seccional de Investigación Criminal (Sijín) conocieron que un empleado, que llegaba en ese momento a la ferretería, se cruzó con tres de los delincuentes cuando salían del negocio y al entrar se encontró de frente con el cuarto antisocial, que lo amenazó con el arma de fuego. Luego, realizó dos disparos en la calle y corrió en busca de sus compinches que, al parecer, lo dejaron abandonado tomando rumbo desconocido.
La persecución
Un hijo del propietario de la ferretería salió posteriormente a la calle a pedir auxilio. Situación que despertó la solidaridad de conocidos, empleados y vecinos, quienes iniciaron por su cuenta y sin armas la persecución de los delincuentes. A la búsqueda se unió José Gregorio, quien residía en el sector y fue empleado de la ferretería.
El coronel López agregó que en la fuga el delincuente abordó un vehículo de transporte informal de pasajeros, intimidando y obligando al chofer a que lo sacara del lugar cuando empezaban a pisarle ‘los talones’.
“El chofer manifestó que al llegar a la esquina de la carrera 7 con calle 16 se le apagó el vehículo y el delincuente se bajó y disparó contra el motorizado. Después volvió a abordar el automotor y dos cuadras más adelante se bajó y escapó”, señaló el subcomandante de la Policía Metropolitana.
Con José Gregorio en el suelo, la persecución terminó. En el sitio quedaron dos cartuchos calibre 45 milímetros.
La víctima fue trasladada al Hospital Jorge Cristo Sahium de Villa del Rosario y posteriormente remitida a la clínica Santa Ana, donde llegó sin vida.
Hasta el cierre de esta edición las autoridades se encontraban tras la pista de los delincuentes, de quienes se desconoce en que se movilizaban.
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