“Crear residencia fronteriza es una opción para el Táchira y Norte de Santander”

Ante el planteamiento del exembajador de Venezuela en Colombia, Pavel Rondón, de una ciudadanía fronteriza para los habitantes del Táchira y del Norte de Santander,  el diputado a la Asamblea Nacional, Walter Márquez, dijo que lo realmente procedente es una residencia fronteriza, ya que la ciudadanía está regulada en la Constitución de Colombia y en la de Venezuela, al igual que la doble nacionalidad, y no se puede restringir a un espacio fronterizo los derechos de nacionalidad y los derechos de ciudadanía.

En tal sentido, Walter Márquez refirió que, en primer lugar se debe regular los derechos de doble nacionalidad, conforme al artículo 37 de la Constitución de la República de Venezuela, y es bien importante que exista una capacidad de circular a ambos lados del río Táchira.

Dijo el parlamentario que, desde el punto de vista jurídico hay tres conceptos que se deben tener claros para no confundirlos; primero, la nacionalidad como vínculo histórico, político y social de un individuo con un territorio; la ciudadanía que son los derechos civiles y políticos; y la residencia que es el lugar donde se vive o se tiene los intereses principales.

“Desde ese punto de vista no se puede restringir los derechos de ciudadanía simplemente a la frontera, debe abarcar ambos países, por lo tanto lo procedente es una residencia fronteriza; para eso, dentro del principio de reciprocidad se debe firmar un tratado binacional que regule los derechos de los habitantes del Táchira y del Norte de Santander”, indicó Walter Márquez.

Señaló que es muy importante darle solución a este planteamiento por la vía de los acuerdos binacionales, y a la par, reglamentar los derechos de nacionalidad y ciudadanía, desde el punto de vista de la Constitución de la República.

Manifestó que es necesario desarrollar estos conceptos en la Ley Orgánica de Fronteras, que tiene más de 15 años de mora legislativa, pues se ordenó el 15 de diciembre de 1999 que se aprobara este instrumento en los dos años siguientes, y ha pasado todo este tiempo sin que eso se haga, para resolver muchos vacíos como el cierre de frontera, el comercio binacional, entre otros.