“Si algún colombiano es dueño de un comercio es porque legalmente tiene doble nacionalidad”

Isabel Castillo, presidenta de la Cámara de Comercio de San Antonio del Táchira

La presidenta de la Cámara de Comercio de San Antonio, Isabel Castillo, aseguró que si algún empresario colombiano tiene  establecimientos comerciales en la frontera venezolana es porque legalmente tiene doble  nacionalidad   o es socio de  un venezolano,  porque la ley  no le permite al  extranjero  adquirir  propiedades en la franja limítrofe, salvo escasas excepciones.

De esta manera  rechazó  los señalamientos  hechos  por el  gobernador del estado Táchira, José Vielma Mora,  quien dijo que los comercios existentes  en San Antonio y Ureña, en su mayoría están en manos de ciudadanos colombianos, hecho que a su juicio perjudica a la  economía venezolana.

“Para conocer la frontera hay que vivir en ella. Las personas extranjeras están aquí legamente establecidas, apegadas a la norma y a la soberanía.   Hay  colombianos que son socios de los establecimientos y de empresas,  pero no propietarios como tal. Hacen sociedad con venezolanos, pero son estos los que tienen el  registro de comercio y cumplen con la normativa de ley. Son empresas legalmente establecidas en la frontera”, dijo  Castillo.

Agregó que también hay empresarios que tienen doble  nacionalidad (colombiana y venezolana), de manera legal, y como venezolanos  pueden  ejercer perfectamente  actividades comerciales en la frontera venezolana; además, por causas diversas, hay comerciantes venezolanos que tienen sus negocios en San Antonio o Ureña,  pero viven en Villa del Rosario y Cúcuta.

Asimismo, hay venezolanos  que han establecido sociedades con empresarios colombianos  y tienen  comercios  en Cúcuta. “Eso  siempre se ha manejado en esta zona fronteriza,  claro está, siempre respetando la soberanía y las leyes de cada nación”, expresó.

Recordó que para que un extranjero  pueda adquirir  propiedades en la frontera  debe  contar con la aprobación del Gobierno nacional, por intermedio del ministerio de la Defensa, y son casos muy excepcionales.

La presidenta de la Cámara de Comercio de San Antonio  consideró que el  contrabando de  productos alimenticios,  combustible  y  otras  mercancías  venezolanas hacia  Colombia,  obedece  en buena  parte al problema  creado por la diferencia del precio del bolívar y el peso. Antes,  cuando  tenía  mayor  poder  adquisitivo  el bolívar,  ocurría lo contrario,   el contrabando era de Colombia hacia Venezuela.

—Una opción -expresó- es regular el cambio de monedas en la frontera, a través de un mecanismo que equilibre  realmente el valor del  bolívar y el peso. “Eso se  puede  lograr  a través de un acuerdo  entre los gobiernos de Venezuela y Colombia. Debe hacerse de tal manera que las personas que habitan a ambos  lados de la frontera no resulten  perjudicadas— declaró.

“La disparidad cambiaria influye en el problema del contrabando, pero el precio de la  gasolina venezolana igualmente incide, ya que en Venezuela es sumamente barata y en Colombia muy cara. El Gobierno debe establecerle  justo valor a la gasolina,  porque de esa manera se reduciría un poco el contrabando y las excesivas  colas de vehículos que  hoy observamos en las estaciones de servicio surtiendo combustible para pasarlo a  Colombia”, señaló  finalmente.