“Exigimos al gobierno abrir todos los puentes porque sí es más barato ir a comprar en Cúcuta”: Patricia Gutiérrez de Ceballos, alcaldesa de San Cristóbal.


“Le exigimos al gobierno y al gobernador Vielma Mora que sean abiertos los pasos hacia el Norte de Santander (Colombia) en su totalidad, porque ciertamente para los venezolanos resulta más económico comprar allá harina de maíz, azúcar, mantequilla, aceite y hasta pañales, en una ciudad de otro país que está a 45 minutos de la capital tachirense”, declaró la alcaldesa de San Cristóbal, Patricia Gutiérrez de Ceballos.

En declaraciones ofrecidas a una emisora radial de la ciudad, vía telefónica desde Caracas, la burgomaestre recalcó que: “Es urgente la exigencia de un canal humanitario, es un secreto a voces que la frontera tiene casi un año cerrada y los venezolanos y los tachirenses seguimos viviendo esta crisis, pero se siguen pasando al otro lado de la frontera gandolas de combustible y  de alimentos en ¨conchupancia´ con las mafias, con los militares, funcionarios de los gobiernos regional y nacional y son ellos los que han sido indiferentes ante esta situación”

Aseguró Gutiérrez que: “Quienes cruzaron la frontera el fin de semana pasado, es decir, más de 35 mil personas según las cifras del gobierno colombiano, porque el venezolano no dice cuántas personas pasaron a buscar medicamentos y alimentos ya que está ciego, sordo y mudo ante la grave crisis humanitaria que vivimos”.

— Ellos (gobierno) no quieren reconocer el hambre que vive el pueblo venezolano y las personas que están muriendo porque tienen problemas de salud y no pueden comprar aquí sus tratamientos y el registro que llevan nuestros ciudadanos de la frontera supera las 50 mil personas que pasaron a Cúcuta el domingo 10 de julio. Por eso nuestro apoyo a los hermanos de la frontera de Táchira con el Norte de Santander y abogamos porque sus solicitudes sean escuchadas de una vez por todas— recalcó la alcaldesa capitalina.  

1 Realice Su comentario Aquí:

Cruzdelina Santos dijo...

Ya estamos viendo los efectos de la apertura: contrabando de extracción de los bachaqueros venezolanos y alza en nuestro país de los productos de primera necesidad. La harina pan y el azúcar desaparecieron de las estanterías y ahora su venta es controlada en las cajas de los supermercados donde solamente se pueden llevar previa adquisición de otros productos. La harina pan que costaba $ 2.600 ahora vale a $3.500, por ejemplo. La semana entrante habrá ajuste del pasaje urbano (de $1.400 sube a $1.600), y si continúa el paro de camioneros el alza seguirá su espiral con cada día de paralización. "Los pobres" de Venezuela están pagando ahora tours para venir a comprar en Villa del Rosario y Cúcuta, y más adelante en Pamplona, Bucaramanga y todo el interior del país. Se avecina un auge para el comercio de alimentos y una difícil situación para los habitantes que verán perder la capacidad adquisitiva de sus salarios, y por lo tanto, su calidad de vida. Esto apenas comienza.