Tiendas cerradas, ninguna actividad económica y calles desoladas se puede observar en San Antonio del Táchira, a propósito de cumplirse hoy 24 horas del cierre de la frontera colombo-venezolana, tras un ataque armado contra efectivos de la GNB.
Desde el miércoles a la medianoche, el acceso principal por el puente internacional Simón Bolívar, cercano al pueblo de San Antonio, así como los puentes Unión de Boca de Grita y Francisco Paula Santander, permanecen bloqueados con alambres de púas y fuerte presencia militar.
Tanto del lado venezolano como el colombiano del puente, decenas de personas estuvieron pernoctando sin poder cruzar la frontera a pie, mientras que el tráfico vehicular es prácticamente inexistente.
Hace un mes se produjo un cierre temporal de la frontera en esa misma zona después de la muerte de un comerciante colombiano en otro enfrentamiento con militares venezolanos, que iniciaron desde el año pasado operativos especiales para reducir la salida de productos subsidiados y la gasolina.
Los dos países comparten una porosa frontera terrestre de 2.219 kilómetros en la que es frecuente el contrabando y el paso de grupos armados ilegales de un lado a otro.
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