Las autoridades colombianas informaron este miércoles, al mediodía, que investigan las circunstancias en las cuales un contrabandista o maletero, de esa nacionalidad, resultó muerto en una trocha que une a San Antonio con el Norte de Santander.
En este sentido, el coronel Jaime Becerra, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), aclaró que Yesid Plata Angarita, como fue identificada la víctima fatal, llegó herido al hospital de Villa del Rosario, donde murió.
La versión que se manejaba ayer en la mañana sobre este hecho, indicaba que “personas con prendas militares habían disparado contra este hombre, que al parecer estaba transportando alimentos por alguna de las trochas”.
La víctima, aparentemente vivía en Cúcuta, pues de allí provino la información que había dejado huérfanos a seis hijos.
En cuanto a la trocha o camino improvisado, al que hizo mención el comandante de la Mecuc, habría sido identificada posteriormente por los mismos maleteros como Los Mangos, lugar por donde se desplazaba Plata Angarita al momento que fue herido mortalmente.
Indican que fue un disparo en la cabeza, pero tal información no fue confirmada. También hicieron referencia a otro joven que resultó herido, y que fue llevado hasta un centro asistencial de Cúcuta.
“Estamos en la verificación de las circunstancias, hay un grupo especial conformado por la Fiscalía, para conocer de manera más clara lo que ocurrió. Hasta el momento, Medicina Legal no ha detallado la herida que presentó la víctima. Se dice que se trata de un disparo con arma larga, tipo fusil”, agregó el jefe policial colombiano.
En relación al enfrentamiento que se inició tras la muerte del contrabandista, cerca de las 8 de la mañana, Becerra dijo que como la protesta se estaba realizando en el lado venezolano del puente, las autoridades colombianas no habían intervenido a esa hora (8:50 am); sin embargo, aseguró que el Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, se encontraba prevenido para actuar cuando fuera necesario.
Aparte de la información que sobre la situación que se vivió ayer en el puente internacional Simón Bolívar ofreció el funcionario policial colombiano, el nutrido grupo de maleteros y contrabandistas que inició un enfrentamiento con las autoridades militares apostadas en esa área, argumentaba que quien le disparó a la víctima fue uno de nuestros militares, sin precisar a qué componente pertenecía.
Pero también señalaron la presencia de varios civiles portando armas de largo alcance en la ribera del río Táchira.
Las escaramuzas obligaron al cierre de la frontera por San Antonio, mientras que por Ureña el tránsito vehicular colapsó debido a la afluencia de vehículos.
“Estamos revisando qué pasó. La información que tenemos es que se trata de un hecho de vandalismo, una situación de desorden público, pero del lado colombiano”, indicó vagamente sobre la situación, hacia las 10:30 de la mañana, el general Efraín Velasco Lugo, jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral Los Andes (Redi).
Con otros jefes militares del Táchira fue imposible la comunicación, para que aportaran información más detallada.
En el enfrentamiento, aseguraron a través de las redes sociales y quienes estuvieron presentes en la revuelta, que en varias oportunidades escucharon disparos provenientes del lado venezolano y detonaciones de lo que suponen eran morteros.
Al fotógrafo de este medio de comunicación, Carlos Eduardo Ramírez, quien viajó a la frontera para apoyar gráficamente el trabajo de Hernández, le intentaron quitar la cámara, y lo amenazaron con detenerlo.
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