Sergio Durán, Gabriel Cepeda y Paola Miranda, habitantes del corregimiento de Palo Gordo, son la viva expresión del positivo impacto que produce acercar la Alcaldía a la comunidad, como sucedió el domingo 7 de junio, cuando la administración de Villa del Rosario se fue a despachar desde ese corregimiento.
“Para mí es de gran beneficio que traigan los servicios de la Alcaldía a los barrios, porque tengo 87 años y se me dificulta caminar. Me hicieron chequeo médico general y me dieron información sobre la vivienda que necesito”, destacó Sergio.
Así como él, un total de 1.000 personas de esa localidad fueron atendidas en la jornada de salud, odontología y vacunación, quienes también participaron en la bailoterapia, con el fin de motivarlas hacia biosaludables.
Gabriel, por su parte, relató que en la Alcaldía Móvil recibió información sobre los métodos de planificación.
La administración del alcalde Carlos Julio Socha, durante esa labor en Palo Gordo, trabajó en los programas de “No a la violencia intrafamiliar”, “No al trabajo infantil”, “No al abuso sexual”, “No a la violencia de género” y “No al aborto”.
Paola Miranda, otra habitante de ese sector rural rosariense dijo: “Soy madre cabeza de hogar, trabajo lavando y planchando ropa tengo seis hijos y nunca me queda tiempo de ir averiguar los programas para madres como yo, y lo de la vivienda. Gracias a Dios y a esta actividad ya sé lo que debo hacer y qué documentos necesito”.
Al igual que ella, fueron centenares las mujeres y los hombres que sin necesidad de desplazarse hasta el centro de Villa del Rosario, pudieron conocer de primera mano los trámites y diligencias que deben hacer para acceder a esos programas especiales.
Los asistentes a la Alcaldía Móvil también acudieron a actividades lúdicas, dramatizados, espectáculos de payasos charlas y talleres. Se regalaron balones, lazos, juegos de dominó y se repartieron refrigerios.
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