Este lunes, en uno de los operativos desplegados por las autoridades militares, efectivos del Destacamento 212 de la Guardia Nacional Bolivariana asestaron un golpe a los contrabandistas en la trocha del barrio Libertad, de San Antonio del Táchira, donde sorprendieron al menos a diez “bicicleteros” cuando con fardos de arroz, bandejas de aceite, carne de res, iban rumbo a territorio colombiano.
En el procedimiento fueron decomisadas cerca de dos toneladas de arroz y otros productos alimenticios.
Los militares no lograron detener a ninguno de los “bicicleteros”, pues éstos al verse sorprendidos y perseguidos por la comisión de la Guardia, abandonaron las bicicletas y huyeron internándose en la vegetación.
La mercancía fue trasladada hacia el comando de la Guardia Nacional, junto con las bicicletas que tienen las parrillas reforzadas y les adaptan cauchos de motocicleta, para que puedan transportar pesadas cargas. En este tipo de bicicleta, los contrabandistas llegan a transportar entre 10 y 12 fardos de arroz.
Los uniformados mantienen la vigilancia en las trochas del río Táchira, las cuales en su mayoría fueron inhabilitadas por la Fanb en el marco del plan contra el contrabando.
Presencia militar
Militares de la Guardia Nacional y el Ejército mantienen rigurosos controles contra el contrabando de productos de la cesta básica y combustible venezolano hacia Colombia, delito que se ve estimulado por las jugosas ganancias que deja la devaluación del bolívar ante el peso colombiano.
A través de la modalidad del “bachaqueo”, en bicicletas reforzadas o en vehículos que tratan de cruzar la frontera por las trocha, la gente insiste en llevar de contrabando para el vecino país alimentos, artículos de limpieza e higiene personal, bebidas refrescantes, leche y otros productos que una vez logran llegar a territorio colombianos, son revendidos al mejor postor.
También la extracción ilegal de gasolina o gasoil se ve estimulada por la devaluación del bolívar ante el peso, pues al caer el precio de la moneda nacional, como ha ocurrido durante las últimas semanas, la ganancia es mayor para el contrabandista.
Esta situación y las dificultades que el ciudadano venezolano para encontrar determinados productos, obliga a la Fuerza Armada Nacional a mantener en la frontera venezolana estrictos controles, revisando toda clase de vehículos, vigilando y patrullando trochas por donde los contrabandistas tratan de pasar artículos venezolanos.
Control al combustible
Asimismo, la Guardia Nacional controla la cantidad combustible que vehículos y motocicletas llevan en el tanque y procede a efectuar el trasegado cuando los militares sospechan que se trata de automotores o motocicletas que simplemente se dedican a la extracción ilegal de gasolina.
Acatando directrices de la Región Estratégica de Defensa Integral, Redi los Andes, Guardia Nacional Bolivariana y Ejército diariamente despliegan acciones de inteligencia, patrullaje y control para contrarrestar este flagelo.
En los puntos de control de San Antonio y Ureña, los militares requisan minuciosamente los vehículos, maletas, bolsos y equipajes de personas que van hacia Colombia, en busca de productos que muchas veces son escondidos o camuflados.
En las diferentes trochas que conducen desde territorio venezolano hacia Colombia a través del río Táchira, los patrullajes y la vigilancia son permanentes.
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