Foto cortesía Jonier Martinez de la exposición "Asegurar confianza Cúcuta"
El bajo nivel educativo es uno de los factores que caracteriza la informalidad empresarial en Cúcuta. Un estudio elaborado por el Observatorio Económico de la Cámara de Comercio de Cúcuta y la Universidad de Santander (Udes), así lo demuestra.
De acuerdo con la información revelada por las dos entidades, de los 252 establecimientos comerciales que participaron en el estudio, el 46 por ciento de sus dueños apenas terminó el bachillerato y el 30 por ciento solo llegó a terminar los estudios de básica primaria. Mientras que el 2 por ciento de los encuestados aseguró tener una estudio profesional y el 3 por ciento una formación tecnológica.
Según Carlos Gamboa Sus, director del Observatorio Económico, este es uno de los índices que dificulta la administración de los pequeños negocios. “Ahora que se tienen los resultados se debe buscar capacitar a los microempresarios en prácticas y formas sencillas para administrar de una manera más eficiente sus microempresas, haciéndolos más duraderos”.
El tiempo de vida de los negocios es otro de los factores que exigen capacitación a sus propietarios. El 39 por ciento tiene un tiempo de vida de 1 a 5 años, el 38 por ciento más de 5 años y el 23 por ciento menos de 1 año.
Al respecto, Gamboa indicó que este tipo de empresas de barrio son -en su mayoría- de subsistencia familiar y que no están pensadas para crecer. “Tras cinco años se presenta un gran número de cierres de los mismos”.
La importancia en la consolidación de estos establecimientos comerciales radican en que contribuyen al desarrollo empresarial de sus sectores y son para el sustento familiar, agregó.
Un aspecto a resaltar es que el 44 por ciento dijo ser dueño del lugar donde funciona el negocio y el 55 por ciento tienen la vivienda y el negocio en el mismo lugar.
Según el estudio de la Cámara de Comercio, el 56 por ciento paga arriendo y el 79 por ciento no paga un canon superior a los $500.000.
Características del estudio
En la muestra se tuvieron en cuenta negocios ubicados en las zonas periféricas de Cúcuta, Villa del Rosario y Los Patios, especialmente en barrios de estratos uno, dos y tres.
El 47 por ciento de los establecimientos comerciales que se tuvieron en cuenta corresponden al sector servicios, el 36 por ciento al sector comercial y el 16 por ciento a la producción industrial.
La característica de estos negocios, según Gamboa, es que funcionan de manera informal. Es decir, que no cumplen con los requisitos legales exigidos como el registro mercantil, el Registro Único Tributario (RUT) y el certificado de Industria y Comercio.
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