Policías encontraron el cadáver en este apartado lugar del Anillo Vial Oriental, en la vía que comunica a Villa Silvania con Lomitas, en Villa del Rosario.
Hace cuatro años llegó a Cúcuta proveniente del Valle del Cauca. Desde entonces, dedicó gran parte de sus esfuerzos a trabajar como ebanista, actividad que desempeñó hasta el martes, cuando desapareció sin dejar rastro, según sus parientes.
Alexander Marín, de 32 años, habló ese día personalmente, por última vez, con una mujer que aseguró haber sido su esposa durante 14 años y con quien tuvo dos hijos, uno de 10 y otro de 13 años. Finalmente, ayer, fue hallado sin vida en la trocha La Carbonera, en el Anillo Vial Oriental, sobre la vía que comunica al puente de Lomitas (Villa del Rosario) con el centro recreacional Villa Silvania.
“A las 11:30 de la mañana fui a buscarlo al taller en el que trabajaba, en el barrio El Callejón. Dialogamos un rato y me dijo que tenía un problema en su trabajo”, dijo la declarante, pidiendo mantener su nombre bajo reserva.
A la entrada de la Sijín, donde esperaba a otros parientes, la citada mujer dijo que el vallecaucano no precisó de qué se trataba el inconveniente, que, sin embargo, lo mantenía muy preocupado.
Sus allegados, incluso, sostuvieron que jamás se enteraron de que tuviera algún problema con otra persona ni escucharon de amenazas en su contra.
Testigos manifestaron que Alexander Marín salió del trabajo al mediodía y, al parecer, se subió a un taxi, sin contar hacia dónde se dirigía.
Pasadas casi 18 horas llegaron noticias de su dramática suerte. Las autoridades hallaron su cadáver en una zona apartada y boscosa, a unos 200 metros de la torre de energía número 23, en el Anillo Vial Oriental.
“Lo encontraron con signos de tortura. Todo parece indicar que le amarraron las manos y que lo ahorcaron. Tenía tatuadas las marcas en su cuello. Seguramente murió asfixiado”, dijo uno de sus allegados, también a la entrada de la Sijín.
El hombre fue encontrado vistiendo camiseta blanca, bluyín y las botas que normalmente utilizaba para trabajar.
El coronel Oscar Wilfred López Ortiz, subcomandante de la Policía Metropolitana, aseguró que un transeúnte alertó a policías de la existencia del cuerpo abandonado.
“Al parecer falleció por estrangulamiento. En la inspección al cadáver no le fueron hallados sus documentos de identidad. Los vecinos dijeron que no escucharon nada”, afirmó el oficial.
Alexander Marín, de 32 años, habló ese día personalmente, por última vez, con una mujer que aseguró haber sido su esposa durante 14 años y con quien tuvo dos hijos, uno de 10 y otro de 13 años. Finalmente, ayer, fue hallado sin vida en la trocha La Carbonera, en el Anillo Vial Oriental, sobre la vía que comunica al puente de Lomitas (Villa del Rosario) con el centro recreacional Villa Silvania.
“A las 11:30 de la mañana fui a buscarlo al taller en el que trabajaba, en el barrio El Callejón. Dialogamos un rato y me dijo que tenía un problema en su trabajo”, dijo la declarante, pidiendo mantener su nombre bajo reserva.
A la entrada de la Sijín, donde esperaba a otros parientes, la citada mujer dijo que el vallecaucano no precisó de qué se trataba el inconveniente, que, sin embargo, lo mantenía muy preocupado.
Sus allegados, incluso, sostuvieron que jamás se enteraron de que tuviera algún problema con otra persona ni escucharon de amenazas en su contra.
Testigos manifestaron que Alexander Marín salió del trabajo al mediodía y, al parecer, se subió a un taxi, sin contar hacia dónde se dirigía.
Pasadas casi 18 horas llegaron noticias de su dramática suerte. Las autoridades hallaron su cadáver en una zona apartada y boscosa, a unos 200 metros de la torre de energía número 23, en el Anillo Vial Oriental.
“Lo encontraron con signos de tortura. Todo parece indicar que le amarraron las manos y que lo ahorcaron. Tenía tatuadas las marcas en su cuello. Seguramente murió asfixiado”, dijo uno de sus allegados, también a la entrada de la Sijín.
El hombre fue encontrado vistiendo camiseta blanca, bluyín y las botas que normalmente utilizaba para trabajar.
El coronel Oscar Wilfred López Ortiz, subcomandante de la Policía Metropolitana, aseguró que un transeúnte alertó a policías de la existencia del cuerpo abandonado.
“Al parecer falleció por estrangulamiento. En la inspección al cadáver no le fueron hallados sus documentos de identidad. Los vecinos dijeron que no escucharon nada”, afirmó el oficial.
Tomado de la Opinión.
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