Las autoridades de Tránsito de Villa del Rosario temen que los motorizados se les salgan de las manos y sigan haciendo de las suyas, pues ahora lo grave no es que conduzcan sin casco o bajo los efectos del licor, sino que atropellan a la gente y, fuera de escapar, se van celebrando en una llanta.
El caso lo relató la inspectora de Tránsito del municipio histórico, Yuli Maribel Guerrero Pacheco, quien afirmó que la víctima fue una mujer adulta que caminaba en horas de la mañana por una de las vías barriales.
“Un motorizado atropelló a una abuela, la dejó tirada, no le prestó atención y se fue haciendo caballito en una rueda, como festejando. Esos son los indicios que tenemos según la comunidad”, expresó la funcionaria.
Ella y otras dos personas han fallecido en lo que va corrido del año por accidentes que involucran a los motorizados, lo que según las autoridades se ha convertido en un problema de incultura que merece mano dura, por lo que esperan intensificar el Decreto 044 de la Alcaldía, que les prohíbe el parrillero hombre y transitar después de las 11:00 de la noche.
Entre los controles resalta el de verificar si los infractores son colombianos o venezolanos, pues en esta zona de frontera, según la inspectora de Tránsito, abundan las excusas de los motorizados para hacerle el quite a los retenes de la Policía.
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