Proposición en el concejo por nuestra historia

ACERCA DE LA EXHUMACIÓN DE ROSCIO Y DE AZUOLA

Respetables concejales:

Hoy están en juego los más preciados intereses culturales de Villa del Rosario, y es justo que este debate ocupe un punto principal en la agenda de nuestras sesiones ordinarias, ya que se cierne sobre nuestro patrimonio histórico la amenaza de profanación de uno de los vestigios que identifica a nuestra ciudad como uno de los más importantes bastiones de la historia de la Independencia.

Del mismo modo que las ruinas de Grecia y de Roma constituyen los bienes más estimables de sus habitantes en cuyos restos perciben la huella de siglos de la humanidad, así mismo los rosarienses somos conscientes de que en cada uno de nuestros monumentos está el alma de nuestros libertadores y que cada una de sus piezas es en sí misma una joya irremplazable en el mosaico de nuestra gesta emancipadora.

Por tanto, dejar sustraer después de casi dos siglos la herencia de cualquiera de estas reliquias atesoradas por los rosarienses como propias de manera tranquila y pacífica, es un despropósito por parte de quienes intenten hollar uno solo de nuestros bienes de interés cultural.

A través de los medios de información hemos conocido los trámites de una comisión de la Asamblea Nacional de Venezuela que viene gestionando la exhumación de los restos del doctor Juan Germán Roscio y el general Luis Eduardo de Azuola a nuestras espaldas, ante órganos externos ajenos a quienes somos por privilegio geográfico sus más inmediatos depositarios y custodios.

Ante esta tentativa, los rosarienses de todas las condiciones tenemos que cerrar filas contra los intentos de violación de nuestros íconos históricos por parte de la comisión parlamentaria de venezolanos, con el diputado Walter Márquez como abanderado de este remoción, que viene haciendo gestiones en la cancillería colombiana, en las Academias de Historia de norte de santander y Bogotá, y ahora en el Congreso Nacional , para realizar las excavaciones en el santuario de la Capilla Santa Ana con el objeto de desenterrar los restos de los próceres de la Gran Colombia, Roscio y Azuola, después de 191 años de imperturbable sepultura, so pretexto de repatriar sus despojos a costa del detrimento patrimonial de nuestro complejo histórico y cultural.

Es imperativo que este Concejo Municipal actué con la premura necesaria, conforme a la atribuciones expresas que le otorgan la Constitución Nacional (Art. 313, num. 9) y como defensores del patrimonio cultural, en torno a las pretensiones desconsideradas de la comisión parlamentaria venezolana que no está escatimando esfuerzos ante los organismos nacionales y departamentales para llevarse de Villa del Rosario esta significativa reserva cultural que nos pertenece por tenencia inveterada y pacífica a los rosarienses.

Sería trascendental que esta corporación municipal materializara su actuación en la legislatura de hoy, dada la trascendencia del hecho, sentando un precedente a través de una declaración pública remitida a las cancillerías y a los congresos de los dos países, al Ministerio de Cultura y al Consejo de Monumentos Nacionales, para dar una respuesta categórica a las intenciones de esta célula parlamentaria, y por su conducto, al gobierno venezolano, a fin de que renuncien a la idea de profanar este nicho del Altar de la Patria exhumando los restos de Juan Germán Roscio, para lo cual recurren al ‘premio de consolación’ de rescatar al mismo tiempo los del brigadier general Luis Eduardo de Azuola

De igual manera, hacer extensiva esta comunicación a las autoridades departamentales y nacionales y a las academias de historia de Cúcuta, el Táchira y Bogotá para desaconsejarlos en el mismo sentido.

¿Pues, con qué derecho esta comisión de diputados venezolanos trata de profanar este componente de nuestros hitos históricos que afirma a Villa del Rosario como fundadora de la vida republicana y usufructuaria de los hechos más importantes de la epopeya independentista?

¿Acaso el sagrario de la Capilla Santa Ana es menos digno que el Panteón Nacional de Caracas?

Si bien es cierto en esa capital nació el Genio del Ávila, a Villa del Rosario le cabe el honroso mérito de haber dado a luz al Hombre de las Leyes. Si Caracas es la capital de Venezuela, a Villa del Rosario le cabe el inmenso honor de haber sido capital de la Gran Colombia con los territorios conformados por la Capitanía General de Venezuela y la Nueva Granada desde la promulgación de la Ley Fundamental dictada el 17 de diciembre de 1819 por el Congreso General de Angostura, hasta el 14 de octubre de 1821 cuando se disolvió el cuerpo soberano del congreso reunido en esta Villa y se designó, luego de una reñida votación, a Bogotá como capital de la inmensa nación.

Fue el mismo Bolívar quien a su paso victorioso por la ciudad en la Campaña Admirable de 1813 fijó sus ojos en este lugar apacible en medio de la guerra para que se reunieran los congresistas de las provincias de Venezuela y la Nueva Granada.

Si yo quedase mandando —le escribiría El Libertador al general Carlos Sublette el 05 de octubre de 1821 después de su posesión como presidente y antes de continuar su gesta emancipadora hacia el Sur—, pediría que fuese aquí, la Villa del Rosario, la residencia de gobierno”.

¿Será que todos estos antecedentes no son elementos auténticos y suficientes para que el gobierno colombiano disuada a su par de Venezuela de su solicitud improcedente a todas vistas, en virtud del carácter de intransferibles que tienen según el artículo 10 de la Ley General de Cultura los bienes de interés cultural que conforman el patrimonio nacional de todos los colombianos? Porque de aceptarse esta excavación, y no es ninguna temeridad afirmarlo, cada uno de nosotros sería responsable ante las presentes y futuras generaciones por haberse quedado cruzado de brazos frente a este despojo cultural como delegatarios del poder popular; y creo que ninguno de los presentes podría mirar a los ojos a quienes depositaron su credibilidad en nuestra gestión como representantes de la voz del pueblo. Yo en mayor grado, por mi condición de raizal de este histórico municipio.

Por eso consideramos una ligereza del gobierno venezolano y su fracción parlamentaria, así como de los académicos y las autoridades nacionales que han acariciado esta posibilidad sin estimar este preciado legado histórico como parte integral de nuestro inventario de bienes culturales, la idea de remover uno de nuestros más importantes monumentos.

La disolución de estos planes de la comisión venezolana tiene que ser asumida en primer término, de acuerdo al mandato legal, por el cabildo municipal con nuestro alcalde a la cabeza, y en respaldo de ellos, por todas las fuerzas vivas de la ciudad para hacer valer nuestros derechos por la posesión tranquila y pacífica de estas reliquias históricas que subyacen en nuestro suelo por determinación del destino. Y si los diputados del país hermano quieren hacer algo por los restos del insigne Roscio, les proponemos la construcción de un mausoleo para honrar la memoria de los próceres que reposan en la Capilla Santa Ana, tal como lo hizo una vez el gobierno venezolano cuando puso en el lugar una lujosa y grande lápida de mármol que redujo a escombros el terremoto de 1875. Pero de ahí a transigir la exhumación de sus restos, por favor, ni lo piensen, porque los monumentos de Villa del Rosario son inviolables.

Por último, sería de sumo interés que así como las instancias del gobierno nacional y los académicos de los centros de historia han atendido las peticiones de la delegación venezolana, fueran escuchados en un mismo pie de igualdad esta corporación municipal y su alcalde popular para que conozcan por sus conductos el criterio de sus habitantes como corresponde a una democracia participativa.

Villa del Rosario, 29 de febrero de 2012.

Víctor Julio Galvis Niño.

Concejal 2012-2015.

(Proposición del concejal Víctor Julio Galvis durante el cierre de sesiones del concejo municipal)

3 Realice Su comentario Aquí:

cristian camacho martinez dijo...

lo apoyamos señor manguera . siga adelante defendiendo los intereses de una pueblo que quedo a merced de los desgraciados cocicos …ahora esperamos su gestión ante el regalado del corzo y
a si se haga posible que nuestra soberanía como municipio como patria chica permanezca intacta … salvaguardándonos de los despiadados manejos que le a dado corpatrimonio y toda su bola de fascistas … que lo único que han buscado es deteriorar y robarle el protagonismo que tiene esta tierra para la América colocándonos a Cúcuta como amo y señor de lo que por derecho nos corresponde .es lo único que nos queda el orgullo de que fuimos grandes aunque nos hayan bajado de nivel estos coicos sin vergüenza : nos han llevado aun punto critico donde los rosarienses ya casi nos sentíamos de la colonia de García Rovira …… jajajaj gracias señores del centro de historia , gracias señores villa noticias , gracias honorable concejal Víctor Galvis , gracias a los pelaos de turismo ,,, gracias a ustedes sentimos que seguimos siendo rosarienses y esperamos que el alcalde y la secretaria de cultura se unan a esta campaña para volver a ser tan importantes como siempre lo hemos sido …..

Anónimo dijo...

para eso es lo q sirve el sr "don manguera" para hablar mmmm.... ¡¡ mucho verbo y poca accion.!!

Anónimo dijo...

El comentario anterior muy probablemente sea escrito por un coico, dada su decidía y desinterés por lo nuestro, fuera de Villa del Rosario, coico miserable!!!