Para evitar que el río Táchira vuelva a inundar las viviendas de La Playa, en La Parada (Villa del Rosario), construirán 200 gaviones.
La Alcaldía de Villa de Rosario comenzará este domingo la construcción de 200 gaviones, para evitar que el río Táchira vuelva a inundar a los habitantes de La Playa, en la Parada (Villa del Rosario).
“Hemos instalado algunos jarillones provisionales para desviar el cauce del río y se han hecho las excavaciones necesarias para comenzar a crear los muros de contención”, comentó Luis Jesús García Bautista, Secretario de Planeación.
El pago de la retroexcavadora que trabaja en el lugar correrá por cuenta del Gobierno Municipal y la comunidad aportará la mano de obra para reconstruir los gaviones afectados.
“Los habitantes se han integrado a la ejecución de los trabajos porque no quieren abandonar sus viviendas. Ya alquilamos la maquinaria necesaria para frenar la filtración de agua y darle seguridad al sector”, agregó el funcionario.
En La Parada
El pasado 3 de diciembre 25 casas colapsaron, 38 quedaron en estado crítico y todo el sector de La Playa, en cercanías con San Antonio del Táchira (Venezuela), se inundó.
El saldo fue de 229 adultos y 146 niños damnificados. Hoy la cifra ha aumentado y la Alcaldía de Villa del Rosario no sabe qué está pasando.
“El día que se inundaron las viviendas hicimos un censo riguroso, pero actualmente la cifra de los damnificados ha aumentado y no tenemos una razón clara del fenómeno”.
El equipo de trabajo del gobierno local teme que algunas personas provenientes del vecino país estén llegando al sitio para obtener beneficios que son para los damnificados.
“Creemos que en el lugar hay personas de Palotal, Tienditas, Ureña y San Antonio. Sin embargo, en los próximos días haremos otro censo para saber lo que está pasando”.
Las familias afectadas por la ola invernal ocupan los salones de clases del colegio de La Frontera, en La Parada, asistidos por la administración municipal, la Defensa Civil y la Policía.
Barrio Santander
Según el último informe del Comité Local para la Prevención y Atención de Desastres (Clopad), en el barrio Santander, parte baja, 40 familias perdieron sus viviendas.
“Las personas no quisieron instalarse en un albergue, por eso la Alcaldía les ha dado un subsidio temporal de vivienda, para que estén en óptimas condiciones de vida”.
La Alcaldía gestiona los recursos necesarios para continuar ayudando a las personas que lo perdieron todo por la ola invernal que sigue azotando a Norte de Santander.
El puente que comunica los barrios Nariño y Santander presenta deslizamiento de su talud derecho, pérdida de la banca y rotura del pavimento flexible.
“La situación es de suma gravedad, puesto que dicho puente fue construido de manera artesanal por la comunidad, con condiciones técnicas no muy buenas, y la alta circulación de vehículos aunada al tránsito de aguas lluvias genera desprendimiento continuo del material que conforma la vía”.
“Hemos instalado algunos jarillones provisionales para desviar el cauce del río y se han hecho las excavaciones necesarias para comenzar a crear los muros de contención”, comentó Luis Jesús García Bautista, Secretario de Planeación.
El pago de la retroexcavadora que trabaja en el lugar correrá por cuenta del Gobierno Municipal y la comunidad aportará la mano de obra para reconstruir los gaviones afectados.
“Los habitantes se han integrado a la ejecución de los trabajos porque no quieren abandonar sus viviendas. Ya alquilamos la maquinaria necesaria para frenar la filtración de agua y darle seguridad al sector”, agregó el funcionario.
En La Parada
El pasado 3 de diciembre 25 casas colapsaron, 38 quedaron en estado crítico y todo el sector de La Playa, en cercanías con San Antonio del Táchira (Venezuela), se inundó.
El saldo fue de 229 adultos y 146 niños damnificados. Hoy la cifra ha aumentado y la Alcaldía de Villa del Rosario no sabe qué está pasando.
“El día que se inundaron las viviendas hicimos un censo riguroso, pero actualmente la cifra de los damnificados ha aumentado y no tenemos una razón clara del fenómeno”.
El equipo de trabajo del gobierno local teme que algunas personas provenientes del vecino país estén llegando al sitio para obtener beneficios que son para los damnificados.
“Creemos que en el lugar hay personas de Palotal, Tienditas, Ureña y San Antonio. Sin embargo, en los próximos días haremos otro censo para saber lo que está pasando”.
Las familias afectadas por la ola invernal ocupan los salones de clases del colegio de La Frontera, en La Parada, asistidos por la administración municipal, la Defensa Civil y la Policía.
Barrio Santander
Según el último informe del Comité Local para la Prevención y Atención de Desastres (Clopad), en el barrio Santander, parte baja, 40 familias perdieron sus viviendas.
“Las personas no quisieron instalarse en un albergue, por eso la Alcaldía les ha dado un subsidio temporal de vivienda, para que estén en óptimas condiciones de vida”.
La Alcaldía gestiona los recursos necesarios para continuar ayudando a las personas que lo perdieron todo por la ola invernal que sigue azotando a Norte de Santander.
El puente que comunica los barrios Nariño y Santander presenta deslizamiento de su talud derecho, pérdida de la banca y rotura del pavimento flexible.
“La situación es de suma gravedad, puesto que dicho puente fue construido de manera artesanal por la comunidad, con condiciones técnicas no muy buenas, y la alta circulación de vehículos aunada al tránsito de aguas lluvias genera desprendimiento continuo del material que conforma la vía”.
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