Falleció otra víctima de explosión de polvorería

Doce días después de la explosión en la fábrica de pólvora de la familia Balaguera, en Villa del Rosario, falleció uno de los heridos, que permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital universitario Erasmo Meoz.Las quemaduras que tenía en más del 40 por ciento del cuerpo provocaron la muerte, el miércoles, de Albeiro de Jesús Rodríguez Montoya.

El hombre de 46 años “no resistió más y ese día, a las 4:05 de la tarde, después de presentar un paro cardíaco falleció”, comentó un familiar.

El 28 de noviembre, la explosión sacudió a Villa del Rosario y provocó momentos de pánico y terror. A las 11:15 de la mañana, paredes y techos de las residencias vecinas, en el barrio San Gregorio, se estremecieron. La vieja fábrica de fuegos artificiales, de propiedad de la familia Balaguera, en la calle 1N con carrera 13, explosionó y causó dos muertos y tres heridos.

Un hijo de Rodríguez Montoya, de 12 años, murió quemado. Los lesionados fueron trasladados a centros asistenciales.La explosión la causó uno de los empleadosEse día, los Bomberos y la Policía aseguraron que un corto circuito habría sido la causa de la explosión. Albeiro de Jesús Rodríguez, antes de morir, le contó a la esposa la verdad de lo sucedido.Según la mujer, el esposo le aseguró que ese día trabajando tranquilos cuando Juan Carlos Gualdrón Balaguera fue a buscar pólvora para elaborar más fuegos artificiales.“Cuando escucharon que el hombre dijo ‘¡Ay, Dios mio!’. En ese momento ocurrió el estruendo y una llamarada se les vino encima”, narró la mujer.Agregó que “al parecer, el hombre rastrilló la pala con que sacan la pólvora y provocó chispas. Al ver eso, salieron corriendo, pero mi hijo se devolvió. Albeiro regresó a sacarlo y no pudo. El fuego los alcanzó”.El niño falleció en el lugar de los hechos, el padre fue trasladado hasta el hospital de Cúcuta.“Lo que mi esposo me dijo fue que el niño había acabado de llegar al lugar. Porque nunca iba por allá, siempre esperaba al papá en otra parte”, aseguró la mujer.

Los familiares de las víctimas están a la espera de los resultados de la investigación, pues les parece extraño que después de lo sucedido permitan vender fuegos artificiales en este lugar.Ayer, en la tarde, allegados, esposa, hijos y amigos acompañaron hasta la última morada a Rodríguez Montoya.La casa de funerales Monsalve llevó a cabo las honras fúnebres.

Tomado de la opinión