Padre e hijo fueron detenidos cuando cobrarían cuota económica a un comerciante de Villa del Rosario

Sería la segunda cuota extorsiva que cobraría la pareja y la tercera pagada por la víctima presuntamente a la estructura del ‘Clan Úsuga’.

La confianza de un ciudadano para denunciar un caso de extorsión presuntamente proveniente de una banda criminal, le permitió a la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) capturar en flagrancia a padre e hijo, cuando recibirían de la víctima la segunda cuota extorsiva pactada en los últimos meses.

Cerca del medio día, personal de la Estación de Policía del Municipio de Villa del Rosario a través de una llamada telefónica realizada al celular del cuadrante, fue alertado de la extorsión que se estaría presentando contra un comerciante en un sector del barrio Sendero de Paz.

En el marco del plan choque ‘Yo no pago, yo denuncio’ que se despliega para contrarrestar la extorsión en todas sus modalidades, los uniformados del cuadrante acudieron al llamado ciudadano, logrando capturar en flagrancia en el lugar de los hechos a Ramón de Jesús Porras Rodríguez, de 41 años y a su hijo Rubén Darío Porras Porras, de 20 años, naturales del municipio de Tibú, residentes en la invasión San Gregorio.

Su detención se produjo en flagrancia, luego de ser señalados por la víctima de ser los autores materiales del cobro de la segunda cuota extorsiva por valor de $100.000 que le habrían hecho señalando venir en nombre de otras dos personas.

Según las labores investigativas realizadas, una de las personas referenciadas como autores intelectuales del cobro de la extorsión, correspondería al jefe financiero de la estructura del ‘Clan Úsuga’ en Villa del Rosario, capturado el mes anterior durante la operación ‘Alfil’ desplegada por la Policía Metropolitana de Cúcuta, en la cual cayeron ocho de sus presuntos integrantes y a seis más les fueron notificadas las órdenes judiciales en su contra.

Según se conoció, esta sería la segunda cuota mensual cancelada por la víctima derivada de la extorsión económica realizada desde meses anteriores, ya que presuntamente como primera cuota ó ‘matricula’ el comerciante habría pagado la suma de $3.000.000. Posteriormente, los pagos lo habrían establecido de forma mensual en cuotas de $100.000.

Las labores investigativas realizadas frente a este caso en particular, señalan que la modalidad utilizada habría sido la extorsión clásica, la cual se da cuando los autores de la exigencia económica llegan directamente hasta el lugar de trabajo o residencia de la víctima; luego de intimidarla mediante amenazas de atentar contra su vida o la de su familia, realizan los cobros en efectivo de manera directa.

La confianza ciudadana dada en este caso permitió evitar la continuidad del cobro de la exigencia económica, por lo cual es importante que la comunidad continúe denunciando oportunamente estos casos delictivos que pueden presentarse mediante las modalidades de clásica, menor cuantía y carcelaria.

Los capturados fueron dejados a disposición de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y luego de ser escuchados en audiencia judicial recibieron medida de aseguramiento en centro carcelario.