Ojalá no se equivoquen

Por: Andrés Hoyos Arenas

Por estos días leí en el periódico La Opinión la tan esperada noticia en torno a la definición de los detalles financieros que permitirán finalmente levantar el complejo  denominado Centro de Convenciones de Cúcuta, y que en general tanta falta le está haciendo a la región.

Lo anterior me recuerda  los chiflidos de que fuera objeto el popular “Socha”,  alcalde de Villa del Rosario, cuando el pasado 8 de Marzo le intentó comentar al Presidente de la Republica las razones que el tenia para proponer que tan importante obra se desarrollara en el Parque Grancolombiano, ubicado dentro de la jurisdicción a su mando. Cabe anotar que las circunstancias no le permitieron tan siquiera ofrecer sus razones.

No sé cuál de las muchas que seguramente tenia preparadas resulte más categórica, pero estoy seguro que cualquiera de ellas tomada independientemente, seria de por sí suficiente para tomar la decisión.

Esta propuesta quedaría mejor planteada por algún miembro de la Academia de Historia de Norte de Santander, no obstante, mientras eso ocurre, intentaré mencionar algunas:

Dentro del complejo histórico se encuentra la casa del general Francisco de Paula  Santander, quien a pesar de las impresiones de algunos  bolivarianos, se considera el colombiano más ilustre que haya parido nuestra tribulada patria.

Fue sede del Congreso de Cúcuta, el cual con la presencia de Simón Bolívar, nuestro reconocido paisano y Antonio Nariño, entre muchos otros próceres, dio origen a la Constitución de 1821.    

Está la Casa de la Bagatela (hoy por fortuna remodelada) lugar donde funcionó el poder ejecutivo de la Gran Colombia y residencia de varios vicepresidentes.

Es el templo Histórico de Villa del Rosario la imagen más reconocida en la memoria patria, no solo de los colombianos, sino también de Venezuela, Ecuador y Panamá.

Inclusive en el otrora Ministerio de Transporte reposa un proyecto que contempla desviar el tráfico vehicular, mediante la construcción de la variante La Parada- Rumichaca, con lo que se facilitaría el desarrollo urbanístico que siempre se ha debido fortalecer.

Al margen de esta secuencia histórica que por fortuna nadie nos puede disputar, y que le imprimen al sector una particular personalidad, (imperdonablemente ignorada por nosotros), se imponen los intereses municipales sobre los metropolitanos,  y hoy se escoge levantar el Centro de Convenciones en un sitio a las afueras de Cenabastos, y que su única fortaleza es el estar  ubicado dentro de la jurisdicción del municipio capital.

Si hubiesen dejado hablar a “Socha”, inclusive habría dicho que el terreno y los planos para levantar esta importante obra en el sitio que le corresponde, están en manos de la Gobernación del Departamento.

Otra sería la suerte si El Hombre de las Leyes o bien, hubiese nacido en Cúcuta, o bien Villa del Rosario perteneciese a la muy noble, leal y valerosa.

Se imaginan lo que alcanzarían a hacer los bumangueses con algo como esto.