258 riñas en zona metropolitana de Cucuta


En la carrera 8 con calle 5 del centro de Villa del Rosario fue apuñalado, por su suegro, un joven de 24 años. (Foto Edinsson Figueroa/La Opinión)

La cifra de riñas en Cúcuta y su área metropolitana sumó 258 entre la noche del viernes y la madrugada de este domingo, en un momento en el que no se han registrado asesinatos en la ciudad durante los últimos cuatro días.

Las acaloradas discusiones del fin de semana, sin embargo, suscitaron dos casos en los que fueron atacados a cuchillo una menor de 11 años y un hombre de 24 años, quienes se recuperan de graves heridas.

El primer hecho ocurrió este domingo, a las 11 de la mañana, en la invasión Brisas del Progreso. Una niña fue lesionada en las manos y la cara con un arma blanca.

“Luis Carlos Gómez Morales, de 30 años, la agredió estando embriagado. Es un caso de intolerancia social”, aseguró el coronel Javier Francisco Mora Jiménez, comandante Operativo de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).

El oficial precisó que el hombre fue capturado y puesto a disposición de fiscales especializados en casos de infancia y adolescencia.

Un investigador, quien pidió no revelar su nombre, dijo que el detenido aseguró que no sabe, ni siquiera, por qué la atacó, toda vez que “ni se conocen. Ella (la menor) pasó por un sitio y él (el agresor), al verla, la atacó. Es lo único que se conoce hasta ahora”.

Una segunda riña, que dejó un herido la noche del sábado, llamó la atención de policías en Villa del Rosario. Carlos Eduardo Vidal Villamizar, de 24 años, fue atacado a puñaladas por su suegro, según la Policía.

“Mis padres nunca lo han querido”, dijo la compañera sentimental del herido, quien precisó, además, que los inconvenientes tomaron fuerza desde que, como pareja, tuvieron un problema de maltrato intrafamiliar en noviembre del año pasado.

La mujer relató que iba abrazada con Vidal Villamizar rumbo al barrio Gramalote, del municipio histórico, cuando de repente vio caer al hombre.

“Vi cuando mi papá lo chuzó. Estoy entre la espada y la pared. No voy a poner la denuncia”, añadió la mujer, anticipando que no intentará evitar que su compañero sentimental radique formalmente la denuncia ante las autoridades judiciales.
(Tomado de la Opinion)

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