"Bajar a la frontera desde San Cristóbal se ha convertido en una verdadera pesadilla, por la presencia de una serie de alcabalas móviles que implementan la Guardia Nacional y el Ejército".
"Mientras la Guardia Nacional, el Ejército y la Cancillería de Venezuela no faciliten el tránsito por la frontera, de los ciudadanos colombianos que tienen intenciones de venir al Táchira a conocer sus bellezas naturales, a comprar productos o a efectuar diligencias, el turismo receptivo no crecerá".
Así lo dijo este viernes Santiago Contreras, presidente de la Corporación Tachirense de Turismo, Cotatur, quien expresó que intentar entrar al Táchira por el puente internacional de San Antonio del Táchira o el de Ureña, "es una verdadera pesadilla por la manera como cumplen los procedimientos los efectivos de la Guardia Nacional y del Ejército destacados en las aduanas, en la alcabala de Peracal y en otros puntos móviles de control".
Considera Contreras que los controles de requisa y atención para el ciudadano colombiano que viene a pasear al Táchira deben revisarse. "La frontera debe abrirse a los colombianos para aumentar los flujos de visitantes al estado. También es necesario que la alcabala de Peracal sea modernizada, porque no es posible que los controles se sigan llevando de forma discrecional y por intuición de los efectivos", señaló.
El presidente de Cotatur informó que el Gobierno regional "hace esfuerzos para promocionar al Táchira en Colombia, aprovechando las ventajas comparativas que tenemos, entre ellas las tarifas atractivas que tienen nuestros servicios turísticos -alojamiento, comida, transporte, recreación- con respecto a los colombianos, debido a la devaluación del bolívar, pero no estamos aprovechando esta circunstancia, sino, al contrario, haciendo todo lo posible por impedir que el turismo fronterizo se desarrolle".
Otro de los problemas denunciados por Contreras es que muy pocas personas quieren utilizar el aeropuerto de San Antonio del Táchira, debido a las largas colas de vehículos en la vía carretera.
"Bajar a la frontera desde San Cristóbal se ha convertido en una verdadera pesadilla, por la presencia de una serie de alcabalas móviles que implementan la Guardia Nacional y el Ejército, de forma poco efectiva para controlar el contrabando. Se suma el punto de control de Peracal. Esto le hace un daño tremendo al aeropuerto y a quienes viven de este servicio", dijo.
Para el presidente de Cotatur, estos puntos de control o alcabalas "buscan controlar el contrabando y el ingreso de personas de manera ilegal al país, pero lamentablemente generan colas interminables, que afectan a los turistas y a los usuarios de la carretera San Cristóbal-San Antonio.
Afirmó que el Gobierno debe adoptar una verdadera política de apoyo al turismo fronterizo, en pro de la economía tachirense y de todos sus habitantes.
Por ello, su llamado es a las autoridades nacionales, a los diputados del Consejo Legislativo y de la Asamblea Nacional, para que agilicen estos controles de seguridad fronteriza, además de planificar proyectos de ampliación de las vías y la modernización de la alcabala de Peracal con la instalación de tecnología moderna.
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