Con música da la hora el reloj de Villa del Rosario


El pasado domingo, los habitantes del centro de Villa del Rosario despertaron con el sonido de las nuevas campanas del reloj de la iglesia Nuestra Señora del Rosario, situada en la calle 6 con carrera 7.
El reloj, que cumplirá 100 años, dejó de funcionar hace dos décadas por culpa de las palomas. Fue reparado por iniciativa del padre Alberto Echeverri Rodríguez, un amante de los relojes de cuerda.
El aparato, fabricado en Zacatlán, Estado de Puebla (México), consta de tres cuerpos y pesa 700 kilos, incluyendo las tres campanas de acero blanco y estaño que pesan 255 kilos.
El primer cuerpo controla las horas; el segundo, los minutos, y el tercero, los cuartos de hora. También, tiene un carillón digital que toca 24 melodías al año, seis cada tres meses.
Éstas fueron programadas para sonar por intervalos de tres horas, aleatoriamente. La primera melodía suena a las 6:00 de la mañana y la última, a las 9:00 de la noche.
Los temas que incluye el carillón digital son el Ave María, el Ángelus y el Alabaré, entre otros. El himno nacional sonará a las 12:00 del día.
El sonido es amplificado por cuatro parlantes instalados en la parte alta del campanario, con un alcance de un kilómetro a la redonda.
Al campanario se llega por una vieja escalera en forma de caracol, que lleva al espacio que ocupa el coro, sitio donde fue instalado el carillón y el sistema del reloj.
En la parte alta, luego de subir dos escaleras empinadas, se llega al campanario donde una de las dos campanas de bronce, acero y estaño cuelga de la viga, acompañada de otras dos más pequeñas, adquiridas por la parroquia en el 2006 para anunciar las misas.
El ingeniero mexicano César Escamilla González, encargado de instalar el reloj, explicó que el aparato es uno de los más grandes que ha fabricado la compañía Relojes Olvera y costó $40 millones. Sin contar los $7,0 millones de la nacionalización.
“El reloj tiene una garantía de cinco años y se está capacitando a dos personas para el mantenimiento preventivo, que debe hacerse cada 20 días”, señaló Escamilla González.
Los encargados del mantenimiento contarán con un manual para resolver posibles problemas relacionados con el funcionamiento.
El padre Alberto Echeverri Rodríguez explicó que los recursos se derivan del arriendo de locales comerciales de propiedad de la parroquia y de las ofrendas de los feligreses.
“Siempre he sido un buen administrador y ese ha sido el éxito de este proyecto. Nunca suelto un billete hasta que no tenga que soltarlo. El año pasado, destinamos $12 millones para el pago de fórmulas médicas a personas de escasos recursos”, anotó.
Informó que el reloj será inaugurado el 8 de febrero. Al acto asistirán los padrinos del proyecto, que ese día harán un aporte para mantener el aparato.

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