Autor: Jorge Edwin Carrillo Yáñez
Magíster en ciencias de la Educación.
Miembro Correspondiente de la Academia de Historia de Norte de Santander
Doctorando de La Universidad Pedagógica Experimental Libertador.
¿Realmente estamos vivos? se plantea desde el principio José ingenieros en su producción “El Hombre Mediocre”; liga la vida directamente a la existencia de la emoción de un ideal, sin los ideales ingenieros afirma que se está muerto, se está inerte y manifiesta de forma radical que el ser se convierte en bazofia humana. Verdaderamente ubica la emoción del ideal como factor determinante y diferencial sobre los demás seres y enuncia la presencia de iluminados en las ciencias, la religión, la filosofía tales como Sócrates , Cristo y helvecio que estremecen la humanidad hasta hoy día , resaltando en ellos la pasión.
Ahora bien, cuando se siente admiración por la virtud de los santos, las magnas gestas de los héroes y la belleza de los artistas pues es un indicador que se tiene entonces la presencia de la emoción del ideal. Hay que no sólo detectar sino que hay que cultivar esa característica de pocos y tan esquiva, esa inquietud de perseguir venerados filósofos artistas y pensadores, el ideal es un gesto del espíritu hacia alguna perfección. Filósofos denominados del porvenir irán poniendo la experiencia como fundamento de toda hipótesis legítima, los ideales de perfección fundados en la experiencia social y evolucionados con ella misma construirán una íntima estructura que realmente generará una doctrina qué será propicia a todas las posibilidades de perfeccionamiento.
Un ideal no es simplemente letra muerta, realmente es una posibilidad hipotética dirigida hacia la perfección, los ideales entre todas las creencias representan el resultado más alto de toda la función que caracteriza al hombre, como lo es pensar. Un hombre, un grupo o una raza pueden ser catalogados como idealistas dadas las circunstancias pero es la experiencia que de alguna manera regulan su imaginación y posibilitan que esta pueda concebir pensamientos dirigidos hacia la perfección, los ideales aparecen cuando la circunstancias son propicias pues estas circunstancias son las que determinan su imaginación qué puede anticiparse a la experiencia.
Consecuentemente se concluye que los ideales no nacen del azar, sino son efectos de causas de la vida y su transitorio equilibrio que desde el punto de vista químico realmente es muy vulnerable aunado al hecho de que la presencia humana realmente corresponde a un periodo brevísimo de la historia del planeta y del universo. Es la imaginación que permite generalizar los datos de la experiencia potencializando los resultados posibles y de allí incrementar la densidad diferencial hacia la inconmensurabilidad del universo del pensamiento y poder extraer de allí ideas que conduzcan hacia la perfección, esto es lo que constituye un ideal un punto y un momento un aquí y un ahora entre todas las infinitas posibilidades.
Crear un ideal es innovar, es mejorar , trascender es hacer diferencial de toda variación adquirida por temperamentos superiores y capaces, donde es la experiencia quién determina la formación natural como un concepto genérico más sintetizado. Los ideales no se forman a partir de la experiencia únicamente y por azar, son inducidos por una gran cantidad de experiencia eso si y que a partir de la prueba y el error se logran decantar; de aquí se puede deducir que no existen o iniciativas inútiles, porque de alguna manera se da la posibilidad a un nuevo ideal de “salir al ruedo” y si hay equivocaciones pues no trascenderá pero de dichas disonancias se irá aprendiendo y acumulando experiencia.
Los ideales representan un nuevo estado de equilibrio ; no es posible lograr que los ideales se conviertan en verdades demostrables pues dejarían de serlo , en el momento preciso en el que nacen se configuran en creencias , nacen eso si de la experiencia e influyen sobre la conducta en la medida en que se cree en ellos y los constituimos como ideales y se identifican con lo perfecto, con lo que así se sueña y así cree, tal como se avizora el presente y es iluminado, se puede decir que influye sobre la conducta y con el instrumento natural de todo Progreso humano ,la educación, consistiendo esta en sugerir los ideales que se presumen más efectivos, eficaces para alcanzar lo inalcanzable, la perfección .
El ideal es un resultado natural que se liga al concepto de evolución, la vida tiende naturalmente a perfeccionarse, Aristóteles enseñaba que la actividad es un movimiento del ser, es decir un discurrir permanente hacia su propia entelequia, la mejor forma o su estado de perfección. Los ideales Son creencias aproximativas, perfección venidera, lo futuro siempre en nuestra mente es lo mejor, siempre soñamos con un futuro mejor que nuestro presente ciertamente no es, pero que gracias a los ideales es como si nos anticipáramos a esa meta “el ideal”.
A medida que la experiencia humana se amplía observando la realidad entonces se pueden construir los ideales, esto gracias a nuestra imaginación. Entonces es en ella, la imaginación donde está ubicado el origen y es entonces la imaginación madre de los ideales, pues gracias a ella es que tomamos la realidad y se hace variante hacia la perfección, la que crea entonces los ideales y les da impulso y que genera en el ser humano el sentimiento de libertad, con tanto valor para dirigir la conducta como las verdades más exactas, la tendencia a perseverar en el ser implica la variación ideal, se encuentra inmerso el principio de síntesis y de continuidad y se refiere al razonamiento de la continuidad y la imaginación que despoja a la realidad de todo lo malo y relaciona virtuosamente con todo lo bueno, depurando la experiencia.
Cada momento en la historia, cada era y generación puede tener su ideal, suele ser patrimonio de un grupo reducido muy selecto que lo reproduce a propósito, todo ideal es una fe en la posibilidad misma de la perfección, es un camino, el anhelo de perfección miento de la verdad no es de ninguna manera exclusivo de las doctrinas denominadas espiritualistas eso sí, ellas desearían contraponerlo al materialismo y a todas las demás, proponen la materia como la antítesis de la idea y después de confundir al ideal con la idea en un juego de palabras juego de palabras es utilizado su beneficio egoísta.
El anhelo de perfección, el conocimiento de la verdad puede estar presente en la mente de un clérigo como de un en un ateo, en un romántico como en un pragmatista, los ideólogos no son idealistas aunque el mal uso y la confusión explicita y mal intencionada seguramente entre idea e ideal favorezca falsas posturas amañadas y tendenciosas. Entonces idea con ideal queda claro qué no son lo mismo, tal como ideólogos no son lo mismo que idealistas. El esfuerzo individual hacia la virtud se concibe y se realizan por sujetos que pueden ser contradictorios entre sus posiciones ellos pueden ser idealistas eso sí, sí saben iluminarse en su doctrina. El anhelo y la posibilidad todos de la perfección no es patrimonio de ningún credo y en este punto José Ingenieros no recuerda a platón, quien se refería al agua que no podía contenerse en ningún vaso.
Un concepto que decide sobre la legitimidad de los ideales es la experiencia, los que mejores posibilidades ofrecen al sentido de la evolución, los que coinciden con la tendencia natural al perfeccionamiento prevalecen, lo único malo es carecer de ideales y esclavizarse a respuestas copiadas e inmediatistas, renunciando a la posibilidad y al hecho de creer en los propios ideales. José Ingenieros afirma: “no hay verdad amoral no existen verdades feas, tampoco fue nunca la belleza Absurda o nociva, mala o perjudicial sus raíces en el error o la desarmonía”.
En el camino de perfección quimérica convergen, se unen formas infinitas del ideal, se complementan no se contradicen, si el ideal de la ciencia es la verdad ,el ideal de la moral es el bien y el ideal del arte la belleza , entonces cómo pueden estás ser contrarias o contrariarse entre sí? Se cuestiona ingenieros; los ideales están en Perpetuo desarrollo, la imaginación los construye observando la naturaleza como un resultado de la experiencia, pero una vez formados en ella es cuando se anticipan al futuro, precisamente es la función del ideal , estar siempre a un infinitésimo de la realidad presente , al mejor estilo de las paradojas de Zenón de Elea , nunca puede igualar la realidad presente y el ideal ,pues se trata de perseguirlo y siempre relativo a una imperfecta realidad.
Ahora bien, Para poder encontrar las imperfecciones y buscar la perfección es necesaria entonces la experiencia, respecto de los ideales un postulado fundamental y de carácter común es su permanente transformación hacia perfeccionamientos, que pueden ser paradójicamente ilimitados pero a sabiendas de que no se encuentran siempre, se sueña con la posibilidad de encontrarlos, sin embargo en cada momento y lugar varían y con esa variación se desplazan siempre. El punto de referencia de los ideales siempre está más adelante de la realidad.
Sin ideales sería inexplicable la evolución, el desarrollo y el progreso de la humanidad, la imaginación es la que enciende el ideal sobrepasando continuamente lo vivido y anticipándose al futuro ,los hechos Son puntos de partida pero los ideales son los que iluminan el futuro afirma José Ingenieros, en la ruta en cada momento de la peregrinación humana se advierte una fuerza que obstruye todos los senderos y aparece entonces la mediocridad ; definiéndose entonces esta característica como una incapacidad de generar ideales.
Respecto a los indicadores de la mediocridad , de debe considerar que imaginación y experiencia van de la mano, características que estarían ausentes en quienes portan la etiqueta deshilachada de la mediocridad, a continuación el autor refiere acerca de los temperamentos idealistas, seres desiguales no pueden pensar de igual manera, los idealistas, esos hombres dispuestos a la emancipación de su rebaño persiguiendo incansables siempre lograr y alcanzar la perfección más allá de la realidad nunca se equiparan al mediocre sumiso y renuente a pensar a soñar a idealizar. Se puede encontrar en el universo dual enfrentamientos clásicos entre entusiastas contra apáticos, generosos contra calculistas indisciplinados contra dogmáticos, son alguien contra los que no son nadie ilustra ingenieros.
Aunado a lo anterior prosigue ingenieros señalando que los hombres sin ideales son de carácter cuantitativos en la medida que utiliza el término para referirse a la posibilidad de distinguir las características de cantidad pero la incapacidad para calificar entre lo mejor y lo peor. Sin ideales sería inconcebible Progreso, el hábito organiza la rutina hacia el porvenir de la imaginación, la ciencia en cuanto a sus posibilidades de acercarse a la verdad, el arte en cuanto a ese camino hacia la belleza, la moral en cuanto a lograr el bien, la historia en cuanto encontrar luces de inspiración y soporte hacia el devenir de la viva y dinámica humanidad. La prudencia de los mediocres frena la iniciativas , el idealista aspira a ser inspirador y portar la antorcha de la sabiduría, se emociona hasta el punto que la lírica es su herramienta preferida , aunque afirma José Ingenieros que en algunos casos esta característica nuble la realidad.
La inspiración es indispensable para crear, es como una chispa que inicia un gran fuego, la imaginación y la experiencia es lo que configura la hoguera ,lo poco que pueden todos depende de lo mucho que algunos anhelan ,se nota entonces que no es común encontrar quienes posean la valentía de enarbolar reales ideales y avanzar hacia el progreso, más bien son muchos y muy comunes los que se suman en el camino sin comprometerse. El original, el imaginativo el valiente líder, el creador, no temen al que dirán son desafiantes a los odios y las críticas que puede levantar sus posturas en la muchedumbre, pueden vivir para los demás pero nunca de los demás, en ellos la característica es la pasión.
En este orden de ideas, viendo esta convicción todo idealismo es hipérbole es exagerado y necesita serlo pues es ambicioso porque precisamente busca la emancipación, es una energía que produce intenso calor, y es esto lo que da estilo y forma al ideal.
El idealismo es contrario a la tibieza, asociado este término a la inseguridad , la exageración de los idealistas es apenas una verdad apasionada, el sabio busca la verdad, el artista también busca la suya que es la belleza, el moralista está siempre en la búsqueda de lograr el bien, tener un ideal es servir a su propia verdad .
Se pueden identificar ados tipos de idealistas según predomine en ellos el corazón o la razón, y son: Idealista romántico; en el cual la imaginación no es inhibida por la crítica y los ideales viven de sentimientos , en contraposición a esto el idealista experimental, los ritmos afectivos son dirigidos y condicionados por la experiencia y la crítica es Quién coordina la imaginación, los ideales son más reflexivos y serenos; corresponde el idealismo romántico a la juventud y el idealismo experimental a la madurez ,el primero es pujante luchador mientras el segundo es resistente y vencedor, el idealismo romántico exagerado insaciable.
Es notorio que todos los ideales contienen una partícula de utopía, en el bien que no puede ser alcanzado pero en el cual se cree ,en todo lo que puede ser perfecto siempre hay una cuota de romanticismo , ahora bien en el idealismo estoico es donde la realidad frente al idealista ejerce presión , a tal punto que la fuerza de las cosas se sobrepone a su personal inquietud, el idealismo entonces toma características experimentales , el idealista sigue custodiando sus ideales pretendiendo realizar siempre sin desmayo, de alguna forma es cuando el realismo sentimental y romántico se transforma en idealismo experimental pues la experiencia regula la imaginación .
Ahora bien, Toda vida proviene de una selección natural. Entre ideales que fueron en su tiempo románticos y que han sobrevivido a través de los siglos, todo individualismo como actitud es una revuelta contra los dogmas y los valores falsos respetados por los mediocres, el ideal en lo que depende de nosotros es ideal y ser indiferente a los demás que transgredan el propio, ahí una fórmula para el idealismo experimental, ningún contratiempo material desvía al idealista.
En consecuencia, El que sirve a un ideal vive de él nadie le forzará a soñar lo que no quiere ni le impedirán su lucha y convicciones, esta es la característica qué denota la posibilidad de emancipación del ser humano y el sentimiento de libertad, apartarse no es cobardía, es una estrategia de espera de estudio de preparación, es simplemente esperar lo posible frente a las burguesías afiebradas según Ingenieros , por remontar el nivel del bienestar material, ignorando que su mayor miseria es la falta de cultura. Los idealistas concentran sus esfuerzos para aquilatar el respeto de las cosas del espíritu y el culto de todas las originalidades desafiantes e irreverentes a una mediocracia que se caracteriza por no tener ideales, podría derivarse de aquí el concepto de política mediocrática .
Alude José Ingenieros a la obra de cellini ubicada en la plaza de Florencia, Perseo exhibiendo la cabeza de medusa, como el símbolo del idealismo contra la mediocridad y afirma que toda brega por un ideal es una brega Santa, romanticismo que merece ser alentado para concebir una perfección que requiere cierto nivel ético y una formación intelectual indispensablemente.. En el hombre mediocre el estrecho horizonte de su experiencia constituye el límite forzoso de su mente por esto el mediocre es esclavo, acepta lo que los demás le imponen dada su estrechez, sectarios pueden serlo, pero no comprenden, por eso se aglutinan como rebaños.
El sentido común es colectivo eminentemente retrógrado y dogmático, en cambio se busca el buen sentido que es siempre relacionado a las características innovadoras y donde florece la libertad los hombres, que serán siempre tan desiguales en la medida de la dominancia a la mediocridad. Podrá definirse el mediocre por la ausencia de características personales que permitan distinguir al individuo en su sociedad, llamados indiferentes, que viven sin saber qué que están vivos, nadie sabe siquiera de su existencia, se los califica como contrabandistas de la vida.
Cada individuo es el producto de dos factores , la herencia y la educación, una continua aclimatación del individuo en la sociedad, las variaciones adquiridas en el curso de la vida que le generan experiencia individual pueden hacer que el hombre se caracterice como una persona que genere diferencias dentro de la sociedad en que vive, desempeñe un papel importante en la invención ,la innovación y la generación de ideales, constituyéndose en líder , guía, antorcha encendida, en el portador del estandarte , el quien proyecte optimismo , quien llame a la carga , motivador y guerrero en el campo por la gloria, aquella que consiste en seguir el ideal., la perfección , la posibilidad de avanzar un poco más, un diferencial que marque contraste respecto del mediocre y su estupor , su conformismo y su miseria.
El hombre superior crea a partir de su imaginación, se apasiona por su creación , cree en ella , la ennoblece y la constituye en ideal, se cubre el pecho con dicho ideal cual armadura y sale al campo a enfrentar a la mediocridad, soportará las criticas, los señalamientos las exclusiones , será tildado de loco de incompetente de irracional se construirán baterías enfiladas de discursos para debilitar su fe, pero el hombre grande, de espíritu superior los combate, su fuerzas son el ideal, la convicción , determinación y arrojo; saldrá victorioso conseguirá la gloria, conquistará la cima de la colina , e inmediatamente el fuego de la pasión forjará un nuevo ideal por el cual abandonar el laurel de la batalla pasada y enarbolar nuevamente el estandarte para una nueva batalla. Esa es la vida un campo de gloria donde el ideal es la causa.
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