El diestro español Víctor Manuel Blázquez y el torero colombiano Ruiz Sánchez ‘Ramsés’ llegaron este viernes a Cúcuta para calentar el ambiente para la corrida del domingo en la plaza de toros portátil La Española en el marco de la primera feria internacional de La Parada, corregimiento de Villa del Rosario.
No será la primera vez que los matadores rivalicen en una plaza colombiana.
La Española está instalada en la explanada donde funcionó la discoteca El Tren, margen derecha de la autopista Internacional, en la ruta San Antonio-Cúcuta.
La Plaza tiene una capacidad para 3.800 personas pero solo se pondrán a la venta 3.000 para garantizar la seguridad de los espectadores.
El cartel lo completa el rejoneador Jorge Enrique Piraquive y se lidiarán reses de la ganadería ‘Cerro El Peñón’ de Juan Bernardo Caicedo, Armero-Guayabal (Tolima).
El lunes se presentará el espectáculo cómico taurino ‘Los Genios del Ruedo’ con los enanitos toreros.
No será la primera vez que los matadores rivalicen en una plaza colombiana.
La Española está instalada en la explanada donde funcionó la discoteca El Tren, margen derecha de la autopista Internacional, en la ruta San Antonio-Cúcuta.
La Plaza tiene una capacidad para 3.800 personas pero solo se pondrán a la venta 3.000 para garantizar la seguridad de los espectadores.
El cartel lo completa el rejoneador Jorge Enrique Piraquive y se lidiarán reses de la ganadería ‘Cerro El Peñón’ de Juan Bernardo Caicedo, Armero-Guayabal (Tolima).
El lunes se presentará el espectáculo cómico taurino ‘Los Genios del Ruedo’ con los enanitos toreros.
Llegaron los asesinos!!! Tendría que ser el titular de esta nota,las corridas de toros son espectáculos crueles, eso no hay que estudiarlo para saberlo. Es cruel valerse del sufrimiento de un animal para el disfrute morboso de verlo morir lentamente, en una contienda que desde el principio tiene perdida pues su destino asegurado es la muerte. Son crueles los gritos de jubilo al ver el pobre semoviente herido, agonizante y con el cuello desgonzado, es esquivado en burla por un humano saludable, respaldado por otros y por tanto en ventaja.
ResponderEliminarSuperar esta herencia vil de un pasado vergonzoso, es evolución. Insistir en defenderla porque creen que les da estatus, es la posición del ignorante que se cree culto. Para los defensores de las corridas: si quieren estatus entonces gánenselo, hagan algo grande para que los reconozcan, si quieren ser cultos, entonces fórmense, ilústrense, no se den aires porque les gustan las masacres.
Este espectáculo de crueldad aberrante, es disfrutado principalmente por la "alta sociedad criolla" que siempre tiene doble moral.
Afortnunadamente estos despreciables "olés" dejarán de escucharse para siempre en Cataluña desde el 1 de enero de 2012, tras la histórica decisión adoptada por el Parlamento regional en Barcelona.
Este Gonofredo si es bien aguafiestas. Hace alarde de una sensibilidad que no es capaz de expresar por el ser humano.
ResponderEliminarLas corridas de toros es parte de la cultura popular que heredamos entre muchas otras costumbres postcoloniales de los españoles. Lo único que debiera eliminarse de ellas es la lidia a muerte y hacer como en Portugal que el bicho es devuelto vivo a los corrales. El toreo es arte, es valor, es plasticidad, elegancia, temple, es la expresión de la inteligencia contra la fuerza bruta del animal.
Gonofredo, deje las falsas posturas. Es más cruel el exterminio que hacen las ladrilleras, por ejemplo, sobre nuestra comunidad envenenando nuestro medio ambiente con la complicidad de nuestras autoridades, y sin embargo usted no dice de este genocidio ni mu.
rosarience: el domingo estuve en la corrida de toros con unos amigos y nos arrepentimos de haber ido la corrida estuvo muy mala nofueron toros sino vacas, la asistencia muy escasa el pueblo no esta en capacidad de pagar esas boletas tan caras, para ver esos toros tan malos ni la papayera toco na habia musica en la plaza ni ambiente de toros y maltrataron mucho a esos animales definitivamente los toros estan en via de estincion MAS NUNCA VOLVERE A UNA PLAZA DE TOROS.
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